Otro año más, dice el tópico probablemente más popular de estas fechas, al margen de la importancia de la salud como consuelo frente al desconsuelo de no haber tenido la suerte del intérprete de la fábrica de maniquíes del anuncio del “gordo” de la Navidad.
La Navidad… días de familia, cordialidad y olor a rica comida en todas las casas. ¿En todas? Ojalá este sí fuere un clásico de estas fechas.
En Sucre Restaurante Café Cultura y Negocios –indica su dirección- “terminamos otro año más, sí, pero en contra de tópicos o letras de canción, sí viéndote. No es tan fácil, qué va. Es muy difícil encontrar alguien así, tan especial como cada uno de los miles de amigos –más que clientes- que aquí han compartido, reído, participado y hasta trabajado”, en esa casa donde “seguirán presentes el aroma, las sonrisas y los deseos, tan buenos como sus platos” y tan por miles como las amistades citadas, a la que Santiago Payá y Mari Carmen P. Bertomeu, directivos de Sucre, dan las gracias.
El restaurante no ha dejado de trabajar hasta los últimos instantes del año, con cientos de personas en la nueva cata de Ramón Bilbao, la remodelación de la Sala Sucre, asistencias a formaciones o maridajes, las reuniones matinales de cerca de 40 empresarios, las sectoriales de destacadas firmas, los nuevos show room o muestrarios de moda de calzado y moda, como se puede presenciar en las imágenes.
Es momento de desear y de creer. “¿Por qué no, si nadie tan excelente como tú es capaz de hacerlo realidad?”.
Feliz 2016 de parte del grupo humano de Sucre.