El centro de restauración y cultura, Sucre, de Petrer, ha reunido de nuevo a cientos de personas en una nueva actividad social, esta vez de motos clásicas, junto a la Asociación Cultural Motos Antiguas de Elda, que ha mostrado impecables modelos, de hasta los mismos años 30. El citado restaurante, en colaboración con numerosas empresas de la zona, ha procedido ante notario al sorteo de una actualísima scooter, que ha ido a parar a un “amigo” cliente de la capital de la provincia, quién pensaba que era una broma. 

La explanada de Sucre Restaurante ha acogido una concentración-exposición de motos clásicas, organizada por la Asociación Cultural Motos Antiguas de Elda, con marcas históricas e impecables modelos  como la inglesa B.S.A., Ducati, Bultaco, Sanglas, BMW, Guzzi y Ossa, entre otras, fabricadas entre 1934 y la década de los 60. 

Vicente Martínez, presidente de la asociación, ha afirmado que son motos cuya catalogación económica “es difícil de realizar, pero no bajan de los 6.000 ó 7.000 euros”. De hecho, ha añadido Martínez, “su mantenimiento anual cuesta unos 4.500 euros y hay motos que no tienen precio”.

Uno de los ejemplos expuesto por el presidente del colectivo es una espectacular BMW, de impoluto color blanco, del año 1967, que dos centenares de personas han admirado en Sucre, además de sonreír y fotografiarse ante modelos “de cine” de Vespa y otras marcas.  

José Emilio Iñiguez, vocal de la asociación, junto a sus compañeros, ha actuado de “guía” de los visitantes, algunos de ellos asombrados por el perfecto contacto de los motores de vehículos que, no solo se han puesto en marcha, sino que han llegado y han salido “casi como de la fábrica” de la explanada de Sucre.

Así se ha expresado Santiago Payá, director-gerente del centro, “muy contento” de escuchar comentarios como que “estas actividades hacen mucho en nuestra comarca”, mientras se fotografiaba con personal de Sucre, en un ejemplo de cordialidad de todo su equipo humano. 

La camaradería, en rima con la sorprendente buena climatología, ha acompañado incluso al notario que ha dado fe del sorteo celebrado de una moto entre “amigos y clientes” de Sucre que, en número cercano a los 700, ha cumplido con las bases. 

El agraciado ha sido Javier G.P., quién no estaba presente en el momento del sorteo. Natural y residente en Alicante, el premiado ha sido informado del hecho en directo por teléfono. “Esto es una broma, ¿no?”, ha preguntado tras realizar otras llamadas, para concluir feliz tras confirmar que no lo era: “nunca he estado en sitios tan buenos como Sucre, ya sea a nivel particular o en cenas de grupo, tanto por lo que comes como por las vistas, nos vemos pronto…”.  

Santiago Payá, sus hermanos y socios, han avanzado que van a seguir realizando actividades “culturales, sociales y gastronómicas” (la próxima con una cena maridada por las bodegas Luis Cañas),  y ello es debido a la colaboración – ha finalizado Payá – de empresas como Bernabeu Modas, Bodegas Ruiz, Bonmercat, Café Jurado, Coto de Hayas, Motos Maestre, Roldán Suministros, Salazones Serrano, Suministros Hoteleros García, Swcheppes y Tres Catorce Verdejo.

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