Sucre desea felicitar. A todos los que toman parte en otras de las fiestas de Moros y Cristianos consideradas como las mejores a nivel mundial.
Las Entradas, en lugar de lo que podrían significar (todos entramos al interior) son un espectáculo exterior. La Retreta tampoco hace su papel de recogimiento en el “cuartel-illo”, al contrario. La reseña de “soldados” en el Alardo advierte del asunto de importancia que van a intercambiar los “jefes” de los bandos en las insuperables Embajadas. El Traslado: “San Antón sale de su ermita”. ¿Desfile? Más bien exhibición infantil. La Diana tiene menos tropa a la que despertar porque cada vez cuenta con más, como en la solemne y ordenada Procesión, ya sea participando o agradeciendo en la calle.
Sucre felicita. Y contribuye tanto abriendo sus puertas de par en par como con la ilustración de arriba, de Mari Carmen Payá, que esperemos guste, como nuestra cocina.
La fiesta se creó para disfrutar de una buena mesa