El centro de restauración y cultura, Sucre, de Petrer, ha procedido a la entrega del premio de una moto a la persona que, entre las 700 que participaron en la iniciativa, resultó agraciada en el sorteo celebrado ante notario con motivo de la exposición de motos clásicas llevada a cabo por la Asociación Cultural Motos Antiguas de Elda. El premiado, quién ha podido confirmar que “no era una broma”, es un reputado médico alicantino que ejerce en Petrer desde hace 23 años y que, además, es un amante-practicante de la velocidad.
Santiago Payá, director-gerente de Sucre, ha entregado “con alegría” y en presencia de trabajadores y clientes, el regalo de una actual moto scooter de color azul a la persona que resultó premiada en el sorteo celebrado ante el notario, Alejandro Pérez, con motivo de la exposición de motos clásicas realizada “con magnífica respuesta de público” por la Asociación Cultural de Elda-Petrer y provincia.
Tras dar fe del cumplimiento de las bases, y tras la extracción de una de las casi 700 papeletas depositadas en una urna cerrada, el agraciado fue Javier García-Pardo, quién no estaba presente en el momento del sorteo.
Natural y residente en Alicante, el premiado fue informado del hecho en directo por teléfono. “Esto es una broma, ¿no?”, preguntó tras realizar otras llamadas, para concluir feliz tras confirmar que no lo era: “nunca he estado en sitios tan buenos como Sucre, ya sea a nivel particular o en cenas de grupo, tanto por lo que comes como por las vistas, nos vemos pronto…”.
Y así ha sido. Javier ya ha recogido su moto, y su correspondiente casco, con el que le ha obsequiado Sucre, “donde nos vamos a seguir viendo, también en actividades como ésta”, ha reiterado el premiado.
Así, el equipo directivo del restaurante, ha podido constatar que, aun viviendo en la capital, García-Pardo es una persona “muy ligada a Petrer y Elda”, ya que ejerce como ginecólogo desde 1990 en el Centro de Salud 1, además de trabajar en una clínica ubicada en la ciudad eldense con otros reputados profesionales médicos.
Pero además, Javier es un especialista en las cuatro ruedas, que “no en las dos” de las motos –ha reconocido- ya que es conductor de rally desde hace muchos años. Ha obtenido varios premios y cuida con mucho mimo su Lancia Delta Integrale de finales de los ochenta.
“No hay nada más que ver el frontal del coche”, ha explicado en Sucre este profesional de las carreras (a la sala de partos o a la meta automovilística), quién ha anunciado junto a la dirección de Sucre que está dispuesto a traer su automóvil en una inmediata exposición, “que ya estamos preparando”, ha avanzado Santiago Payá.